CORFÚ es una de las islas griegas más famosas del mar jónico. Posee una superficie de 593 km2, siendo superada solo por la isla de Cefalonia dentro del archipiélago conocido como islas jónicas. Desde la isla se puede divisar la frontera entre Grecia y Albania. Tan solo los 2 km del Estrecho Septentrional de Corfú separan esta isla de la costa albanesa.
La isla de Corfú estuvo durante muchos siglos bajo el control de la República de Venecia, que rechazó varios asedios otomanos antes de caer bajo control británico tras las guerras napoleónicas.
Su capital, Kerkyra, se encuentra aproximadamente en el centro de la costa oriental de la isla. Su arquitectura guarda muchas similitudes con las ciudades italianas portuarias. En 2007, la ciudad vieja (casco antiguo) de Corfú fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
En esta isla griega también podemos encontrar pueblos pintorescos en el interior por los que parece que no pasan los años. Corfú se caracteriza por sus accidentadas montañas y una costa repleta de atractivos turísticos. Los paisajes son de una belleza espectacular, con inmensas playas y calas, aguas con unos azules incomparables y todo ello enmarcado en un entorno natural alucinante. Cape Drastis, Paleokastritsa, Porto Timoni Beach o el Canal d´Amour son solo algunos de los lugares que no te puedes perder en la isla 😉
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